lunes, 18 de junio de 2012

XIV

Ola desbocada que galopa
mecida por tu respiracion.
Como las crines del caballo
que, guiadas por el viento,
desafían las leyes de la belleza.
Notas musicales nacidas
en las manos de un pianista
son tus caricias tornadas en palabras.
Despertando melodías sin final
que las sirenas cantan.
hechizando mis sentidos
cuando se sumergen y
dejan en la superficie del azul mar
tu nombre escrito en el agua.

domingo, 17 de junio de 2012

XIII

Nubes de mil formas que dominan el cielo.
Envían a sus hijas disfrazadas de lluvia.
Agua pura y cristalina
que se posa en las cumbres.
La blanca nieve helada
desea el calor que emana
de nuestros cuerpos.
Quiere derretirse y viajar al mar
llevadas por manantiales
y ríos de aguas bravas.
En su camino, bosques y valles
le cantan historias de nuestro amor.
Al destino soñado se acercan
y se produce el éxtasis.
Yo en la orilla del mar.
Tu en el río que llega.
En tus labios, dulce agua
y salada en los míos.
Un beso sella el encuentro.
La madre nube sonríe,
llora de felicidad.
Nuevas hijas son sus lágrimas.
El ciclo eterno de la vida

se alimenta de nuestros besos,
respira nuestras caricias.

Santi Malasombra

jueves, 14 de junio de 2012

XII

Camino de cristales rotos elegí.
Camino que me aleja de ti, Loba.
Camino equivocado y funesto.
A tus brazos quiero volver
tras mi huída cobarde y vil.
Anhelo tus aullidos, tus besos.
Caballero renegado seré para ti.
Arrasaré con fuego mi reino.
Renunciaré a mis cofres de oro.
A la gloria de batallas ganadas.
Mi código de honor será el tuyo.
Mi reino será tu bosque.
Mi oro tus ojos de loba.
Mi gloria tus caricias.
El pasado ya no existe,
sólo el presente..a tu lado.
Tiemblo de placer
sólo al verte.
Orgullosa y reinante
en la manada del monte.
Conviérteme en lobo
y aullaré para ti, junto a ti...
Junto a tu luna, que será la mía.

Santi Malasombra

 

miércoles, 13 de junio de 2012

XI

De frialdad y falsedad en mis palabras me acusas.
A mi, que me postré ante tus pies.
Que te seguí al bosque sin condiciones.
Que renuncié a todo por ti.
Que temblaba de gozo ante tus aullidos.
Ahora aullas a la luna.
Luna de gélidas y distantes rocas.
Luna que ilumina sólo cuando quiere
algo de sus siervas en la tierra.
Luna que oculta su lado oscuro.
Intenté ser el lobo alfa y no lo conseguí.
Loba guerrera y poderosa.
Loba implacable y perturbadora.
Loba de sinuosas curvas femeninas.
Caminaré hacia la espesa niebla
con la sequía de lágrimas en mis ojos...
Esperando el día del Juicio.
El fiscal del amor me acusará y yo,
cabizbajo y triste, renunciaré a la defensa.
Deseo que el tribunal me presente a la parca,
de no ser así, mi condena será insufrible.
Ofrecí la sangre de mis venas,
el aliento de mi alma gastada por siglos de busqueda,
todo mi ser palpitaba por ti...Y lo sigue haciendo.
El placer de una sola de tus palabras
no es comparable a nada de este mundo.
Una de tus caricias es motivo para vivir.
Tu ausencia hace que mi destino no importe.
Cruel sino será seguir respirando sin tu mirada.
Loba, mátame...Apiádate de mi y mátame.
Acaba con la agonía de este príncipe
que, humilde y triste, camina desesperado.
Recuerdos de placenteros encuentros
no son suficientes.
No quiero recordar, quiero vivir.
Vivir a tu lado.
O morir...
 
Santi Malasombra

martes, 12 de junio de 2012

X

Cómo es ella?
Ella es el poderoso vuelo del cóndor y la suavidad de una mariposa.
El zarpazo de una bestia salvaje y la caricia de una pluma.
Un tenebroso pantano y la orilla del mar.
El huracán que destruye y el placer de la brisa.
El castigo eterno y el gozo del paraíso.
Ella es el fantasma que persigo...Y persigo...Y persigo

Santi Malasombra

De momento, seámos amigos.
De momento, me das pan para la sed,
abrigo para el calor
y sal para la herida.
Me ofreces amistad
cuando el amor me consume.
De momento, mejor un adiós.

Santi Malasombra

lunes, 11 de junio de 2012

IX

El río de frías lágrimas se desbordó.
Abundantes han sido, pero no quedan.
Todo lo hice por seguirte al bosque,
me humillé, de rodillas me puse ante ti.
No bastó, nada basta para saciar tu hambre.
Hambre de amor, hambre de mi, hambre de nada.
Tu insaciable gula me devoró al fin.
No te culpo, loba de instintos primarios,
loba que devora sin compasión las almas.
No he sido príncipe, ni hombre,
sólo un bufón entre tus afiladas garras.
Acepté tus cadenas, tu yugo en mi cuello.
Te di mis alas, mi sangre, mi aliento.
Invoqué tu perdón por mis gélidas palabras,
pero no fueron frías...no fueron frías.
Retiro mi disculpa desesperada.
Arrodillado no puedo ver tus ojos.
Arrastrado por el fango no puedo sentirte.
Loba poderosa, perturbadora y altiva.
Sedienta de sangre esclavizada.
Huyo de tu reino.
Moribundo y desangrado espero llegar,
no importa dónde, pero llegar.
Ya no hay lágrimas...
Ya no hay...
Ya no...

Santi Malasombra

 

miércoles, 6 de junio de 2012

VIII

¿Qué he hecho yo para merecer esto?
Para merecer tus labios frescos de roja fresa.
Tu sonrisa dulcemente maliciosa.
Tu cuerpo esculpido por Eros.
Tu aliento de menta salvaje.
Tu caricia de embriagador roce.
Para merecer tus palabras de Loba.
Este pobre Príncipe sin reino se pregunta:
¿Qué he hecho yo para merecerte?
No es modestia, es maravilloso asombro.
Sueño inalcanzable que se hizo realidad
entre los brazos de mi loba.
 

Santi Malasombra

Principe, preguntas que has hecho?
Has despertado en mi, sentimientos olvidados.
Has arado profundos surcos en la tierra fértil de mi alma.
Has puesto una sonrisa alada en el cuenco suave de mi esencia.
Has compuesto la mas bella melodía, con acordes de suspiros.
Has encendido esa chispa que incendia mis sentidos.
Has logrado que sea MUJER, LOBA, NIÑA, entre tus brazos.
El asombro que tengo yo ante esta pregunta.
que se responde sola, en la cálida mirada verde de tus ojos.
La lógica no existe en este encuentro
solo tú y yo
con eso basta...

Alicia Terán

 

martes, 5 de junio de 2012

VII

Relato finalista del Concurso de Microrelatos de Mayo de Kallejeo.com

Las bases establecían escribir un microrelato de 100 palabras incluyendo obligatoriamente 5 palabras propuestas por los responsables del concurso: Ciudad, perro, invisible, final y nostalgia.
La ciudad paseaba por las calles del perro. Espera, algo no cuadra. Los perros no tiene calles, tienen pulgas. La pulga parece invisible, pero no lo es. Una pulga huía del final del rabo de un gato. ¿Era un gato?
El gato se paró en la esquina del bar del que acababa de salir. El felino barritaba con nostalgia una canción de El Mago de Hoz. ¿Barritaba? Eso es cosa de elefantes. Miré a mi alrededor y no vi ningún paquidermo. ¡Qué raro! Entonces comprendí que lo más parecido era la "trompa" que llevaba después de trece chupitos de whisky.

Santi Malasombra


lunes, 4 de junio de 2012

VI

Mares tenebrosos me aguardan
con tormentas, rayos y truenos.
El Fuego de San Telmo será mi amigo,
mi único amigo en este mundo sin ella.
Nubes de negras intenciones ocultan la luna,
Las estrellas se niegan a guiarme.
Errante como el holandés maldito
quiero naufragar en los brazos del mar.
Bellas sirenas se acercan para consolarme,
las desprecio y me entienden.
Vieron en mi alma desesperación,
angustía y llanto...
Abandonado y triste navego para siempre
en las crueles aguas del desamor.
La orilla está lejos, lejos, lejos...
La loba en el bosque y el príncipe en el mar,
maldecidos por los dioses del deseo.
Neptuno, ¿a qué esperas?
hunde mi barco en la eternidad del infierno,
rescátame de la vida...quitándomela.
Poderoso príncipe fui en tiempos
y en débil hombre me convirtió la Loba.
 
Abro mis ojos y sigo vivo sobre mi barco,
noble navío de nobles maderas
que soportó las embestidas por mi.
Me levanto, cansado y desorientado
alzo la vista y la veo
Águila poderosa que me vigila,
bellas ninfas se acercan a mi
enviadas por la Loba para guiarme,
apenas me miran, no se atreven.
Sólo me muestran el camino de vuelta.
El águila escoltará mi alma
hacia el reino de la mujer.
Mujer convertida en animal
que me espera altiva y poderosa.
Llegamos al bosque, la miro y comprendo.
Me arrodillo ante ella pidiendo perdón.
Deseo que sus garras rodeen mi maltrecho cuerpo,
que sus ardientes caricias me alimenten,
que sus húmedos besos me hagan respirar,
respirar para vivir
Junto a ti...Loba.
 
Santi Malasombra

domingo, 3 de junio de 2012

V

   Estuve tres años en el ejército. En La Legión española. Porqué me alisté es una historia muy larga y no es el tema de este post. Recuerdo a un tipo que nos visitaba regularmente, Pablo. De aspecto desaliñado. El típico hippy que todos podéis imaginar. Tenía un don de gentes que hacia que le cayese bien a todo el mundo.
   Nos soltaba unos discursos impresionantes sobre su visión de la vida, alejada del materialismo que nos consumía y nos sigue consumiendo hoy en día.
   Evidentemente, sus palabras no le daban de comer. Construía  con sus propias manos pipas de cañas de bambú, cajitas para hachis y papel de fumar, collares, pulseras, etc.
   La primera vez que hablé con él me dio cierta pena, pero a los pocos minutos descubrí que lo que sentía es envidia sana. Tenía las ideas muy claras y disfrutaba de la vida, de los pequeños placeres sin marcarse grandes objetivos. Sólo sobrevivir un día más.
   Recorría toda Andalucía de cuartel en cuartel, refugiándose en los alrededores y vendiendo sus cosas.
Cada dos o tres semanas aparecía por el nuestro, en la serranía de Ronda.
   Pasaba la noche debajo de un gran olmo que había a pocos metros del cuartel en su saco de dormir.
   Una fría mañana de Enero, la patrulla de la Policía Militar lo halló muerto. No había conseguido sobrevivir a la helada nocturna.
   Pablo nos enseñó a muchos a vivir. A valorar lo que tenemos.
   La Guardia Civil se hizo cargo del cuerpo y gracias al Coronel-Jefe de nuestro Tercio nos enteramos de que no tenía familia.
  Rudos e implacables legionarios velamos su cadáver y lloramos por él. Se hizo una colecta para pagar su incineración y en un acto marcial y militar esparcimos sus cenizas bajo aquel olmo, que era su casa cuando nos visitaba.
   Han pasado muchos años desde entonces y de vez en cuando me acuerdo de aquel hombre privilegiado. Digo bien, privilegiado. Su mirada delataba que era feliz.
   Descansa en paz, Pablo.
 

sábado, 2 de junio de 2012

IV

El anochecer me alcanza cuando no estás.
La fría brisa de la tarde me asusta,
anuncia que el amor no volará esta noche.
Añoro el sol de la mañana,
el amanecer de tu cuerpo,
el nacimiento de tu risa.
La oscuridad me priva de tus ojos.
Siento tus caricias en la ceguera del ocaso,
pero quiero más. Soy insaciable.
Mis sentidos desean la vida, todos ellos, sin excepción.
Verte, tocarte, olerte, oirte y degustarte.
Amanece para mi, Loba.
Que la oscuridad se arrepienta de existir.
Que pida perdón por privarme de tu belleza.
Que la condenen por impedir nuestras miradas cómplices.
Cómplices para siempre, cómplices del delito de amar,
cómplices de apasionados encuentros.
Si el juez de la noche se atreve a juzgarnos,
la luz, apasionada y sincera, nos indultará.

Santi Malasombra

viernes, 1 de junio de 2012

III

Uno de los grandes sueños de la humanidad es conseguir una máquina para viajar en el tiempo.
Sueño inalcanzable, a menos que creas en la Teoría de universos paralelos.
Pero existe una fórmula para conseguir "viajar" hacia el pasado.
Basta con escuchar unas simples notas de una canción.
Puedes visitar con tu mente esa discoteca en la que bailaste un lento por primera vez con una chica.
Ese beso nervioso que vuelve a cobrar vida. Esa ruptura acompañada por los acordes de un tema pop.
Esa mirada traviesa de adolescente mientras bailas.
No hay duda, la música es la máquina del tiempo definitiva para volver a vivir alegrías y penas,
ilusiones y desencantos, amor y desamor.

Santi Malasombra